Reportaje

Comunidades resienten deterioro de manglar y pérdida gradual de Laguna El Aguaje, que sustentan a unas 700 familias

Comunidades resienten deterioro de manglar y pérdida gradual de Laguna El Aguaje, que sustentan a unas 700 familias

26 de julio “Día Internacional de la Defensa del Ecosistema Manglar”

Redacción y fotografías: Margarita Sol

La Unidad Ambiental de la Universidad de El Salvador, UNAUES, por medio de su equipo técnico, realizó una visita al Estero de Jaltepeque, para conocer la situación de deterioro de la zona de manglar y de la laguna El Aguaje. La visita fue coordinada por representantes del Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador, FIAES y de la Organización Ayuda en Acción, entidades que están implementando diferentes proyectos de restauración en esta importante reserva natural.

El Estero de Jaltepeque se encuentra localizado entre las desembocaduras de los Ríos Jiboa y Lempa, en los departamentos de La Paz y San Vicente y es considerado el segundo bosque salado más grande del país, con una extensión de 49 mil 454 hectáreas.

Deterioro de la zona de manglar

El problema en el Estero de Jaltepeque es complejo e involucra una serie de factores, comenzando por la expansión de los asentamientos humanos y la mala gestión de los recursos que se ha venido realizado a lo largo del tiempo, lo que ha provocado la usurpación de terrenos para actividades agrícolas y ganaderas; la tala indiscriminada del mangle y quemas no controladas en la zona; además de la presión que ejercen las comunidades sobre los recursos que provee el bosque salado, porque todas estas comunidades están asentadas sobre lo que un día fue manglar.

Por otra parte, en la cuenca alta y media, no se está haciendo la debida protección de los suelos y esto ocasiona que todo el sedimento y basura que la lluvia arrastra, vaya a parar a la parte baja, provocando más deterioro en el terreno y en la laguna El Aguaje.

La zona ha sido desatendida por mucho tiempo y a pesar de que el MARN ha tenido presencia en este lugar, en los últimos tiempos, el camino hacia la recuperación de esta importante reserva natural, requerirá de un trabajo arduo y del compromiso de todas las instancias competentes.

“Ahí es donde yo siento que ha faltado una integración institucional”, porque en este problema, además del MARN, tienen competencia los Ministerios de Seguridad, de Salud, de Obras Públicas, de Economía y de Educación. “El tema ambiental es un tema transversal, porque la economía se basa en la sustentabilidad de los recursos y eso lo han dicho las grandes potencias”, subrayó Herrera y agregó “hemos perdido prácticamente el 60 por ciento del bosque salado a nivel nacional. En esta zona y en Jiquilisco hay todavía cuerpos importantes de bosque, pero en otras partes han quedado reliquias, pedazos que no se conectan”, lamentó Daisy Herrera, coordinadora territorial de FIAES, quien acompañó el recorrido.

Los procesos de restauración que fueron definidos conjuntamente con el MARN

La representante de FIAES habló sobre algunos proyectos que su organización desarrolla en esta zona del país. Uno de esos proyectos es “Cash for Work” (dinero por trabajo), un proyecto que se realiza con el apoyo del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, MARN, con fondos de la Unión Europea y la cooperación Alemania, como una primera iniciativa de este tipo a nivel de Latinoamérica y que tiene como objetivo restaurar una amplia área de esta reserva natural protegida.

“Nuestro proyecto “Cash for work”, es muy importante, porque estamos orientando el trabajo de las comunidades hacia la restauración de los ecosistemas y sus servicios. Es así como, en FIAES, después de casi 27 años de trabajo ambiental, creemos que esta oportunidad que se nos ha dado, a través del MARN, es muy valiosa para venir consolidando todo el conocimiento del trabajo humano”, señaló la ambientalista.

El proyecto de restauración del Estero de Jaltepeque, coordinado por FIAES, incluyen diferentes procesos y actividades, como son la rehabilitación ecológica de 28 km. de área de manglar, en sectores de bosque salado de los municipios de San Pedro Masahuat, San Luis La Herradura, Zacatecoluca y Toluca; 40 hectáreas de reforestación en las áreas naturales: Isla Tasajera, Escuintla, Astillero, Nahualapa y Laguna El Gallo; 25 km. de barreras con especies piro-resistentes.

Se incluye también 15 km. de obras de conservación de suelo y agua en Tehuacán 1 y Cerro La Cucaracha; 8 hectáreas de reforzamiento de bosque de galería en Nahualapa y 28 km. de brechas cortafuego, entre otras acciones que buscan revertir la degradación causada en los 28 km.  de canales del ecosistema de manglar en esta zona del país, mediante rehabilitación hidrodinámica y biofísica de su entono.

Los ecosistemas que están en las zonas de la costa son muy trascendentales, por el tema de la seguridad alimentaria y también por el tema de la prevención de los desastres naturales. Estos ecosistemas proveen muchos servicios a las comunidades, en ese sentido, el compromiso de los pobladores es grande para conservar y restaurar, porque de ahí obtienen los recursos para subsistir, por medio de la pesca artesanal.

Hombres y mujeres se integran, en iguales condiciones, en proyectos de restauración

Con la iniciativa “Cash for Work”, se está apoyando a las comunidades afectadas, no solo por la restauración del ecosistema de manglar, sino también porque, con este proyecto, se abren fuentes de empleo para los pobladores por medio 20,033 jornadas, que benefician directamente a más de mil 300 personas, pertenecientes a un promedio de doce cantones del cinco municipios y dos departamentos de comunidades costeras del Complejo Jaltepeque, según la representante de FIAES.

El tema de equidad de género está inmerso en el proyecto “Cash for Work”, porque representa un espacio laboral, en igualdad de condiciones para hombres y mujeres. Según Daysi Herrera, la cooperación alemana exigió la participación y ayuda para las mujeres en este proyecto.

La naturaleza en sí del proyecto, es llevar un beneficio económico a estas comunidades que han sido duramente afectadas por el tema de la pandemia, porque su forma de vida es “salir a buscar el día a día, de rebuscarse en el tema del comercio, de ofrecer servicios” y cuando todo el comerció cerró, estas comunidades se vieron muy afectadas económicamente, sostiene la coordinadora territorial.

En el recorrido por el manglar, el pasado mes de marzo, se pudo constatar el arduo trabajo que realizan las mujeres beneficiarias del proyecto y la importante labor que desarrollan en conjunto con los hombres, en las tareas de reforestación del manglar. Ana Concepción Ramírez, presidenta de una Asociación de Desarrollo Comunal, declaró que, como mujeres, se sienten agradecidas porque se les haya tomado en cuenta en iguales condiciones que a los hombres.

Como ya se dijo, la principal actividad económica de las comunidades aledañas al manglar es la pesca artesanal, porque es de ahí que obtienen ingresos para mantener a sus familias. “Nosotras venimos aquí a pescar. Salimos, vendemos y comemos de lo que sacamos y de ahí nos vamos a nuestros terrenos, a sembrar el frijol, el maíz y tenemos que dividir el tiempo entre el trabajo y los quehaceres de la casa”, declara Doña Concepción.

Las necesidades de estas comunidades son grandes y las oportunidades muy pocas, sobre todo porque su fuente de ingresos, la pesca, no da para más. “Muchas veces nosotras nos acostamos sin cinco, preocupadas que el día de mañana nuestros hijos van a comer. Yo agarro mi atarraya, mi cumbo, mi bote y me vengo a pescar, aunque sea tres, cuatro dólares que me lleve de aquí, pero mi hijo ya tiene que comer, ya tiene para llevar siquiera una cora a la escuela”, nos relata la trabajadora.

“Yo me identifico con todas las mujeres y el grito de todas es que venga otro proyecto y nos ayuden a recuperar esta laguna, porque nosotras aquí vivimos, somos madres, somos pescadoras y somos agricultoras”, declara Concepción y de manera efusiva hace un llamado para que las autoridades de Medio Ambiente intervengan y los apoyen con el problema del manglar y de la laguna, donde hay mucho por recuperar. “Nosotras hemos andado cercando, hemos andado limpiando canales para sembrar (mangle) y esperamos que esto no se vuelva a talar”, exigió.

La Laguna El Aguaje posee características únicas

“Una laguna tan hermosa que ha sido y ahora es una decepción”, comenta con tristeza Don Fermín Paniagua, presidente de otra Asociación de Desarrollo Comunal y residente del caserío El Astillero. Esta laguna constituye un cuerpo de agua con características diferentes, porque tiene la capacidad de acumular agua dulce y agua salobre, provenientes del Río Acomunca y de las corrientes que fluyen desde el mar, a través del Estero de Jaltepeque, condición que la hace única en el país.

Según Don Fermín, la Laguna El Aguaje representa el patrimonio de unas 700 familias que habitan en las comunidades aledañas y constituye la fuente de ingresos para los pobladores, quienes se dedican a la pesca artesanal, no obstante, la condición actual de la laguna no permite satisfacer sus necesidades básicas. “Aquí, si ustedes lo pueden ver, en el verano todo está seco, nada de agua, si acaso los pescadores sacan para el pan del día”, comenta y agrega que en invierno todo es diferente, pues en esta temporada la laguna logra acumular un poco más de agua.

Para Daysi Herrera, el problema grave que hay en la laguna es el azolvamiento, “aquí va a llegar un momento que la deposición de suelo y de sedimento va a superar los niveles del agua y el agua no va a volver a cubrirlo y se va a convertir en potreros y al final en cañales, donde ya no lo aprovechan las comunidades, sino que lo aprovechan una o dos personas”, de ahí la importancia de restaurar estos ecosistemas, porque se garantiza el beneficio ambiental y la seguridad alimentaria de las comunidades, sostiene.

Para Don Fermín, la reducción de la pesca se debe a diferentes razones, entre ellas la proliferación de la maleza y la contaminación por desechos que arrastra el río. “Todos los desastres que trae de allá arriba (el Río Acomunca), vienen a parar acá y aquí se quedan, nosotros hemos sacado toneladas de desechos sólidos, lo que es botellas plásticas, bolsas plásticas, lo que es durapax”, explica.

Otro elemento importante a destacar es que la zona de la laguna está siendo utilizada por el sector ganadero, “cada quien ha cercado su parcela y ahora son potreros”, señala Don Fermín y enfatiza que desde el año 2011, se están realizando diferentes esfuerzos para recuperar este recurso natural, “le vengo apostando a esto y siempre le pido al Señor que me preste vida para verlo algún día, porque esa es mi meta, primeramente Dios que así va ser”.

La petición de Don Fermín es concreta y está dirigida al gobierno central

“Lo que nosotros queremos es un proyecto de la limpieza del Aguaje, salvar el Aguaje”, según relata el lugareño, allá por los años 90s, la laguna era muy distinta, “era un cien por ciento espejo de agua y ahora contamos con un 20 a 30 por ciento” y recordó que durante la noche se podía mirar, a través de la laguna, el reflejo de las luces de Zacatecoluca y del volcán. “¿Ahora cómo lo vemos?”, reclama.

“Aquí estamos en una contaminación, porque nosotros estamos abandonados en todo, nosotros quisiéramos que ahora nos echaran la mano, les pedimos detener las talas masivas, a lo cual venimos sembrando porque necesitamos aire puro, que si no hay árboles no hay vida y si no hay mangle no hay pesca”, insiste el pescador. “El llamado que le hago al presidente (de la República) es que nos eche la mano acá. Él dijo, cuando se tiró para presidente, que sus ministros iban a ser territoriales, hasta la fecha no he visto ni un ministro aquí”, lamentó.

Lo que el líder comunitario solicita en reiteradas oportunidades es que el gobierno, por medio del Ministerio de Medio Ambiente y de Obras Públicas, lleven maquinaria al lugar para limpiar las canaletas de desechos, sedimento y árboles caídos y así el agua pueda ingresar a la laguna y vuelva a poblarse de especies para la pesca, entre ellas el punche y el camarón, especificó.

Las comunidades hacen el llamado a las autoridades competentes, para que se recupere esta importante reserva natural, pues tanto el área de manglar como la laguna han venido perdiendo terreno y acumulando desechos en las últimas décadas. “Le pedimos al gobierno, a medio ambiente, que nos eche la mano, no por el bien propio mío, sino por el bien de todas las familias… que nos ayude a recuperar esta laguna El Aguaje, eso es lo único que nosotros le pedimos”, insistió.

 

Fuentes consultadas:

Inspección de campo, realizada por el equipo técnico de la UNAUES

https://climapesca.org/2017/07/estero-de-jaltepeque/

https://webquery.ujmd.edu.sv/siab/bvirtual/BIBLIOTECA%20VIRTUAL/REVISTAS/A/ADUC0000312.pdf

http://ecosistemasacuaticos1.blogspot.com/2012/06/proyecto-azolvamiento.html

 

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